Mando digital

A veces vivimos experiencias cotidianas que nos muestran la dicotomía analógico-digital.  Ayer fui testigo de la dificultad que supone el adaptarse a la nueva televisión digital para alguien mayor, pasando de tener 8 o 10 canales a disponer de 40 programas, con opciones e informaciones adicionales.

Mandos a distancia

Los mandos a distancia nos invaden

Unos vecinos de casa, ambos con una lucidez y salud envidiables para su notable edad, me pidieron ayuda para comprar y poner en marcha un nuevo televisor adaptado a la TDT. La compra hecha en unos prestigiosos grandes almacenes ya tuvo sus anécdotas. Aunque lo más relevante fue la instalación y puesta en marcha, con un servicio contratado a los almacenes.

Los operarios decidieron desinstalar el aparato de video dejando solo el DVD. Así se evitan complicaciones. Después ordenaron los 40 canales digitales y ya se marchaban sin sintonizar los analógicos (en mi edificio disponemos de algunos canales de satélite que emiten en abierto) y habiendo dado escasas explicaciones.

Hubo que pedirles que explicaran cómo acceder al sonido dual, cómo ver la información del programa y la guía de programas, pero pronto nos convencimos que eran nativos digitales y no disponían del tiempo para dar una formación a una persona analógica.

Teléfono clásico

Teléfono clásico

Aún somos muchos los que nacimos con el maravilloso interfaz de un teléfono de disco.  Aprendimos a marcar números de teléfono con aquella rueda mágica. Luego llegaron las primeras calculadoras que en España fue casi al mismo tiempo en el que aparecieron los télefonos de teclado. Y vimos que los números de las calculadoras estaban al revés de los teléfonos.

Y con las teles modernas llegaron los mandos a distancia que  empezaron a ser imprescindibles con la llegada de las televisiones privadas, porque hasta 1990 en la mayor parte de España tan solo había 2 canales, conocidos entonces como «la tele»  y el «UHF».

En otros países ya tenían muchos canales y por ello el mando a distancia se usaba desde mucho antes. Y aquí fuimos acostumbrándonos y nos convertimos en expertos del zapping.

Estas navidades habrá 270 pueblos en la Comunidad Valenciana que apagarán definitivamente la TV analógica y hoy nos enteramos que los hogares de un 16% de la población aún no están preparados.

Tendremos también que ayudar a prepararse a las personas analógicas. Es un cambio importante, que con buen ánimo y espíritu de «descubridor digital», será más gratificante para todos.

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Fotos cortesía de Auto Exposure Canada y Mònica Co en Flickr